viernes, 30 de septiembre de 2011

Perez Royo dixit. Interesante...

Probablemente en la próxima legislatura vamos a encontrarnos de nuevo con el problema de naturaleza constituyente de la inserción de Cataluña y el País Vasco en el Estado español. 

En el caso de Cataluña, el origen del problema está en el fracaso de la respuesta que a dicha inserción se le intentó dar mediante la reforma del Estatuto de autonomía. La reforma estatutaria se realizó cumpliendo escrupulosamente el procedimiento previsto tanto por la Constitución como por el Estatuto. Se aprobó por la mayoría cualificada en el Parlamento proponente y se pactó el contenido de la propuesta con la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados, siendo aprobado dicho pacto por las Cortes Generales primero y por el cuerpo electoral catalán en referéndum después. A pesar de ello, el Tribunal Constitucional consideró que el pacto entre los dos Parlamentos sometido a referéndum era anticonstitucional en aspectos relevantes. La inserción de Cataluña en el Estado no puede producirse de acuerdo con la voluntad manifestada por los catalanes en el ejercicio del derecho a la autonomía, sino que tiene que hacerse en unos términos considerablemente distintos impuestos por el Tribunal Constitucional. Así es como está resuelto el problema en este momento. 

No creo que pueda sorprender a nadie que la consecuencia de la decisión del Tribunal Constitucional fuera situar al nacionalismo convergente fuera del consenso constituyente de 1978. Si nuestra voluntad expresada a través del procedimiento previsto en la Constitución y en el Estatuto no cabe en la Constitución, no podemos considerar la Constitución como propia. La reciente reforma de la Constitución ha venido a reafirmarlo en esa nueva posición. Así lo ha dicho en repetidas ocasiones el president de la Generalitat, la más reciente en el acto de celebración de la Diada en la Residencia de Estudiantes el pasado 12 de septiembre. Y así lo ha dicho también en el Congreso de los Diputados el portavoz del grupo parlamentario de CiU, Duran Lleida. Una vez alterado el pacto entre el Parlamento de Cataluña y las Cortes Generales refrendado por el cuerpo electoral catalán por la decisión del Tribunal Constitucional y una vez reformada la Constitución de la forma en que ha sido reformada, el nacionalismo convergente catalán ha pasado a considerar la Constitución como algo que se le impone desde fuera. 

Independientemente de que se esté de acuerdo o no con la sentencia del Tribunal Constitucional, el hecho cierto es que en Cataluña muy mayoritariamente no se está de acuerdo con la respuesta que a partir de dicha sentencia se da a la inserción de Cataluña en el Estado. La próxima legislatura es la primera que se va a abrir con una Cataluña que mayoritariamente no se siente comprometida con la Constitución en lo que a su lugar en el Estado se refiere. 

En el País Vasco la reincorporación de la izquierda abertzale al proceso electoral en el pasado mes de mayo ha alterado significativamente el mapa político. Es previsible que dicha alteración se vea confirmada en las próximas elecciones generales y más todavía en las elecciones autonómicas que se celebrarán un poco más de un año después. Da toda la impresión de que la mayoría parlamentaria PSOE-PP, que sustenta al Gobierno presidido por Patxi López, va a dar paso a una mayoría nacionalista, que, no se puede olvidar, aprobó una reforma del Estatuto de Gernika, cuyo eje central era el llamado derecho a decidir. Dicha reforma no pasó el filtro del trámite de toma en consideración en el Congreso de los Diputados. Ahora mismo no se está hablando de este tema, porque hay otros más urgentes que están ocupando la agenda política. Pero una vez que se acepte de forma generalizada la tesis del lehendakari de que “el terrorismo, tal y como lo hemos conocido en Euskadi, ha terminado para siempre” y como consecuencia de ello, quede consolidada la participación política de la izquierda abertzale y su ocupación de posiciones de Gobierno, es prácticamente seguro que se volverá a plantear la revisión de la respuesta del Estatuto de Gernika a la inserción del País Vasco en el Estado que, previsiblemente, volverá a girar en torno al derecho a decidir. El problema territorial va a volver a plantearse a lo largo de la próxima legislatura. Y lo va a hacer en un momento en el que se ha producido un deterioro perceptible en el prestigio del Estado en general y en el del Estado de las Autonomías en particular. Me parece que se debería ir pensando seriamente en una reforma constitucional que abordara el problema de frente y no como lo hicimos en 1978.



PROBLEMA CONSTITUYENTE
 Javier PÉREZ ROYO
Publicado en El País
2011.09.30




Vuelve la hora feliz...


Vuelve la hora feliz. Y es que no hay nada
sino la luz que cae en la ciudad
antes de irse la tarde,
el silencio en la casa y yo.
Mi carne, que ha vivido en el tiempo
y lo sabe en cenizas, no ha ardido aún
hasta la consunción de la propia ceniza,
y estoy en paz con todo lo que olvido
y agradezco olvidar.
En paz también con todo lo que amé
y que no quiero olvidado.

Volvió la hora feliz.
Que arribe al menos
al puerto iluminado de la noche.

                                 Con Quién Haré el Amor  -fragmento-
                                                                   Francisco BRINES


jueves, 29 de septiembre de 2011

Reforzando Euskadi

REFORZANDO EUSKADI

El mundo de la llamada Izquierda aber-tzale despreció, salvo excepción, ir a Madrid a hacer política, digo salvo excepción, pues en las de octubre de 1989 se impuso la tesis de sí hacerlo, tesis ahogada en sangre un 20-N, noche anterior a la sesión de investidura, cuando dos pistoleros causaban la muerte de Josu Muguruza y gravísimas heridas a Iñaki Esnaola mientras cenaban en el hotel Alcalá con otros electos de HB.

En general para ese mundo el PNV ha sido un traidor por acudir a Madrid. Lo suyo era argumentar el no ir, así lo hicieron Karmelo Landa, Arnaldo Otegi, Olarra y Barrena en 1999 manifestando que «no tiene mucho sentido que la Izquierda abertzale defienda la participación en unos comicios en los que se elige a los máximos representantes del marco político español. La coherencia nos exige cortar con las elecciones españolas. Cerramos el paso a la intromisión del Estado español en el proceso democrático vasco». Participar pues en las elecciones al Congreso o al Senado era hacer el juego al españolismo, justificar la españolización de Euskadi, poner en valor a la España constitucional, apoltronarse, era abdicar en la lucha por una Euskadi soberana, significaba validar las leyes españolas y un amplio decálogo vergonzante de dejaciones históricas para con lo vasco. Ellos, al contrario, eran la salvaguarda y la coherencia, la esperanza y la columna vertebral para el auténtico buen futuro para los vascos. Pero decenas de años más tarde el mismo Otegi y otros, repito, muy tarde, pero afortunadamente, han decidido e impulsado con una mezcla de cordura y habilidad, conveniencia y convicción, la asunción práctica de la legalidad vigente y de los principios democráticos de la política y la convivencia, de ahí Bildu-Sortu.

Y así, los mayores detractores de las leyes españolas las acatan escrupulosamente, incluida la Ley de Partidos. Y deciden que ahora sí hay que ir a Madrid, obviando años y años de decir lo contrario, empaquetan su coherencia, asumen con pasmosa deportividad el celofán justificativo del 'imperativo legal' y es más, puestos ya a ello, proponen angelicalmente a todos los nacionalistas vascos ir de la mano a las Cortes españolas «para acumular fuerzas y plantar cara». Hoy y ahora sí toca, decenas de años más tarde pontifican con total naturalidad, que nos encontramos ante «una oportunidad para reivindicar y exigir que la ciudadanía de los cuatro territorios de Hego Euskal Herria conforma un sujeto político», pues según ellos «hoy existe una oportunidad inmejorable para profundizar en la nueva fase política abierta en Euskal Herria para acrecentar la adhesión social y fomentar el debate político, de modo que, hagan irreversible tanto el avance en el proceso de paz y soluciones democráticas como la apuesta por un cambio político y social desde posiciones soberanistas y progresistas». Ayer no, hoy sí, lo que antes era feo y sospechoso ahora bonito y precioso, el mundo debe pararse obligatoriamente y arrancar de nuevo a su ritmo preciso. Pues bien, «quien pide música luego le toca bailarla».




Pero hay más, como quien personifica la verdad absoluta y la inescrutable sapiencia sobre oportunidades históricas, y ante el rechazo y escepticismo del PNV, entienden ellos oportuno achacar a éste el «utilizar excusas infundadas, que no vienen a cuento, para tratar de justificar una posición política difícilmente justificable desde un punto de vista abertzale y de la acumulación de fuerzas en defensa del derecho a decidir como pueblo que nos corresponde». Bien, ¿y en qué ha consistido hasta hoy la tan ahora cacareada colaboración abertzale entre nacionalistas para defender conjuntamente, acumulando fuerzas y cogidos de la mano el desarrollo íntegro del Estatuto de Autonomía, votado mayoritariamente por la ciudadanía vasca, allá donde había que defenderlo con uñas y dientes? En su día decidieron que el Estatuto no servía, y así lo menospreciaron, ridiculizaron y boicotearon, a pesar y por encima de las urnas. Aquí no ha pasado nada, de balde.



Iñigo Urkullu, presidente del PNV, ha definido la propuesta con claridad: «Eso es enredar, porque para apoyarse mutuamente en Madrid, colaborar y actuar conjuntamente en todo lo relativo a los derechos de Euskadi no hace falta compartir listas. A Madrid hay que ir a trabajar, no a hacer testimonialismo». Ciertamente del trabajo en la II República nació el primer Estatuto y del de estos años se está logrando consolidar el segundo, porque Euskadi se hace día a día sin olvidarnos nunca de quiénes somos y mucho menos de cuáles son nuestras aspiraciones, pero con los pies en el suelo, el corazón caliente, la mirada larga y la cabeza fría. Tras una legislatura provechosa para los intereses vascos al aprovechar los resquicios de un Zapatero debilitado, nos veremos pronto ante una triple opción: la del testimonialismo hueco y vacío, la de los intereses ajenos a los vascos, o la de reforzar Euskadi de la mano de una opción que lleva recuperando autogobierno cada legislatura. Es fundamental la centralidad y responder a los intereses de los vascos, continuar construyendo nación vasca y tejiendo sin pausas la Euskadi autogobernada. Tenemos derecho a decidir nuestro estatus y pactar y negociar lo que queremos ser. Acabo con D. Juan Tenorio: «Llamé al cielo, no me oyó y pues sus puertas me cierra, de mis pasos en la tierra responda el cielo, no yo». Nosotros a lo nuestro. Venimos de antes

                                                                                              José Manuel BUJANDA AZURMENDI

                                                                                                           Publicado en DV 28-09-2011

domingo, 25 de septiembre de 2011

Alderdi Eguna 2011

Aberri, patria... Patria es la nación amada, en palabras de Engracio de Aranzadi, "Kizkitza", pronunciadas allá por 1911... izan zirelako gara, garelako izango dira...


Aurtengo Alderdi Eguna iritsi da. Etxekoak, goizari goxo-goxo bat dastatu eta gero Forondara goaz EAJrekin bat eginez. Sustrai finkaturik, gure aberriaren etorkizuna eraikitzen... 

Izan garelako izango gara! Gora Euzkadi Askatuta!!!

Algo nuestro, intacto...

CUANDO DEL AMOR NO DICE LA ÚLTIMA PALABRA


Cuando algo nuestro intacto
se funde y me confunde
- somos uno en dos partes
que sufren por su cuenta -
desesperadamente algo nuestro se busca
sin ayuda de nada algo nuestro se encuentra.

La unión se realiza,
la ausencia no atormenta,
el dolor se desmaya,
el silencio se expresa
- cuando el amor no dice
la única palabra
está escrito el poema -.

Alto profundo es esto que nos une,
esto que nos devora y que nos crea;
ya se puede vivir
teniendo el alma
cogida por el alma
del que esperas;

pena es tener tan sólo una vida
- sólo una vida es poco
para esto
de querer sin recompensa -.


                                                                              Gloria FUERTES


viernes, 23 de septiembre de 2011

Recuerdos


Creo que celebrábamos mi cumpleaños, pocos años aún. La amona Bale, mi ama y mis tías. Y mis primos, siempre mis primos, todavía habría de llegar alguno más. El comedor, el de la casa de mi niñez, la que quedó hecha escombro y cenizas en diciembre del setenta y cuatro. Recuerdos, todos...
En menos de un año mis primos y yo hemos quedado huérfanos de ama y de tías, ay... Pero aquí estamos, aún estando sin estar, que la vida sigue. Y que no pare...

BESOS

Hay besos que pronuncian por sí solos
la sentencia de amor condenatoria,
hay besos que se dan con la mirada
hay besos que se dan con la memoria.

Hay besos silenciosos, besos nobles
hay besos enigmáticos, sinceros
hay besos que se dan sólo las almas
hay besos por prohibidos, verdaderos.

Hay besos que calcinan y que hieren,
hay besos que arrebatan los sentidos,
hay besos misteriosos que han dejado
mil sueños errantes y perdidos.

Hay besos problemáticos que encierran
una clave que nadie ha descifrado,
hay besos que engendran la tragedia
cuantas rosas en broche han deshojado.

Hay besos perfumados, besos tibios
que palpitan en íntimos anhelos,
hay besos que en los labios dejan huellas
como un campo de sol entre dos hielos.

Hay besos que parecen azucenas
por sublimes, ingenuos y por puros,
hay besos traicioneros y cobardes,
hay besos maldecidos y perjuros.

Judas besa a Jesús y deja impresa
en su rostro de Dios, la felonía,
mientras la Magdalena con sus besos
fortifica piadosa su agonía.

Desde entonces en los besos palpita
el amor, la traición y los dolores,
en las bodas humanas se parecen
a la brisa que juega con las flores.

Hay besos que producen desvaríos
de amorosa pasión ardiente y loca,
tú los conoces bien son besos míos
inventados por mí, para tu boca.

Besos de llama que en rastro impreso
llevan los surcos de un amor vedado,
besos de tempestad, salvajes besos
que solo nuestros labios han probado.

¿Te acuerdas del primero...? Indefinible;
cubrió tu faz de cárdenos sonrojos
y en los espasmos de emoción terrible,
llenáronse de lágrimas tus ojos.

¿Te acuerdas que una tarde en loco exceso
te vi celoso imaginando agravios,
te suspendí en mis brazos... vibró un beso,
y qué viste después...? Sangre en mis labios.

Yo te enseñe a besar: los besos fríos
son de impasible corazón de roca,
yo te enseñé a besar con besos míos
inventados por mí, para tu boca.
                          
                                                   Gabriela MISTRAL


miércoles, 21 de septiembre de 2011

ALZHEIMER, un día..

Ser feliz, sentirse feliz, depende, casi siempre, de los pequeños detalles, querer y que te quieran y poco más. Creo que la mayoría de las veces no hay otro secreto, por muy complicada e imperfecta que sea esta vida nuestra. Es por eso que olvidar que alguna vez quisimos y nos quisieron, no recordar ni saber que todavía nos quieren, es, cómo decirlo... el vacío absoluto. Y uno de sus nombres, tiene tantos... Alzheimer, una enfermedad maldita para la que no hay vida vivida y que pone freno a la vida por vivir. Hoy, dicen, es su Día Internacional, un día... 
Por favor... 
Que todos y el resto de los días lo sean también, que todos los días son lo más parecido a una cárcel, plena de amor en ocasiones pero cárcel al fin y al cabo, para cuidadores, familiares y enfermos. Aún así, no perdamos la esperanza. 


Querer y que nos quieran, no hay otro secreto... el cariño, el amor incondicional, el que no se mide, el que brota, se recibe, se da... siempre, siempre, siempre...