domingo, 21 de noviembre de 2010

Ernest Lluch, duela hamar urte...


Conocí a Ernest Lluch con motivo del homenaje a Lluis Companys que celebramos en Irun en agosto del año 2000. Lo que comenzó siendo una cosa de andar por casa se convirtió en algo mucho más grande, con una sentida representación en el viejo puente internacional de Santiago, el mismo en el que la policía alemana entregó al President en 1940 a los franquistas. Yo formaba parte del comité organizador a nivel municipal, de la mano del Alcalde de Irun, mi querido Alberto Buen, junto a Nestor Basterrechea, Fernando San Martín, Toni Strubell y Lourdes Villagrán, al que luego se incorporó el mismo Lluch, todo un lujo. Era un tipo sencillamente encantador, con esa pinta entre despistado y sabio, que lo era, ambas las dos. Nunca pensé que, sólo tres meses después, tuviera que llorarlo porque unos etarras malnacidos lo asesinaran como a un perro, por la espalda, malditos hijosdeputa… 

Aquella multitudinaria manifestación de Barcelona, en la que una emocionada pero serena Gemma Nierga se saltó el guión con unas palabras que dejaron de piedra a algunos de la primera fila pero arrancaron una de las ovaciones más sentidas que yo recuerdo, me sacudió el alma… estoy convencida de que Ernest, hasta con la persona que le mató, habría intentado dialogar; ustedes que pueden, dialoguen, por favor… 


Hoy hace diez años de la muerte de Ernest Lluch, asesinado por ETA. Ohore!!! 

Goian Bego.