¿Pero quién es aquel que viene por la costa? ¿Quién es éste que llega con prendas teñidas del sur? Es tu nuevo Señor y él habrá de besar las encadenadas rosas de tus labios. Yo te adoraré en mi llanto, como lo hice antes...
Un poema de Oscar Wilde en recuerdo y homenaje a una mujer dispuesta a morir antes que perder su dignidad. Mi aliento y solidaridad para con Aminetu y todos cuantos luchan por seguir adelante, allí donde estén, en este frío e invernal lunes de noviembre.